El aceite de tomillo destaca por sus propiedades antibacterianas, antiespasmódicas, antirreumáticas, expectorantes y calmantes, además de ser un antiséptico natural.
Tradicionalmente se ha utilizado para estimular la mente, fortalecer la memoria y la concentración y calmar los nervios.
Advertencia
No lo debe utilizar directamente sobre la piel, recomendamos diluirlo primero en un aceite portador (de oliva o de almendras). Antes de utilizarlo se debe probar en una zona pequeña de la piel para descartar cualquier alergia.
También debe mantenerse alejado de los bebés y niños pequeños.
Nota. Consulte siempre un especialista si desea utilizar un aceite esencial como remedio o terapia.
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